La tercera versión del Congreso Internacional de Trabajo Social, organizado por la Red de Escuelas de Trabajo Social del CRUCH, la Universidad Católica de Temuco y la Universidad de la Frontera, estuvo centrado en las “Tensiones éticas, políticas de la formación y práctica disciplinar del campo social. Rupturas y consenso hegemonía en América Latina”.

Durante los tres días en que se realizó el congreso, fueron cientos los representantes de distintos países de Latinoamérica, quienes llegaron a discutir y debatir diversos temas. Por nuestra Universidad asistieron Gabriela Gutiérrez, directora de la Escuela de Trabajo Social; Lorena Campos, directora del Departamento de Trabajo Social; Julia cerda, directora de CEFACOM; Gabriela Pantoja y Pablo Suárez, académicos del Departamento de Trabajo Social, además de estudiantes de esta carrera.

Los estudiantes UTEM tuvieron un rol fundamental en este evento, pues expusieron las siguientes ponencias: Camila Reyes y Zaida Said: “Travestis, transgéneros y transexuales en situación de calle”; Ivonne Guzmán, Fabián Llaneza e Iván Oyarzún, “El cómic como medio de visibilización de las supresiones histórico-culturales de las infancias migrantes haitianas en Chile”; Diego Figueroa Díaz y Carolina Vera, “Discriminación y racismo en Chile, imaginarios de una identidad blanqueada” y Cristián Reyes con “Fotografía: instrumento epistemológico para la dignificación social”.

Gabriela Pantoja, académica UTEM, quien además presentó la “Sistematización de experiencias para construir saberes y conocimientos desde las prácticas. Sustento orientaciones y desafíos”, destacó la importancia de participar en este tipo de congresos, pues “permite generar conocimiento colectivo disciplinar desde el Trabajo Social, pero también desde otros ámbitos, como por ejemplo, la educación”.

“Dialogar sobre la sistematización de experiencias con académicos, académicas y estudiantes aporta a procesos de construcción colectiva como forma legítima de construir conocimiento vigente y pertinente con espíritu y apuesta ético política de sumar y multiplicar, llegando a incidir en el ámbito de las ciencias sociales y humanas”, agregó la académica Pantoja.

Así también lo ve la estudiante de quinto año de Trabajo Social, Zaida Said, quien agrega que “poder compartir nuestra experiencia de investigación con otros (as) alumnas, docentes y personas en general, nos sirvió primero para soltarnos frente al público y prepararnos para la defensa de título, segundo para visibilizar la problemática y tema que nosotras abordamos en la tesis”. Además, dice estar agradecida por el apoyo prestado por la universidad y su profesor guía Pablo Suárez en todo el proceso.

Gabriela Gutiérrez, directora de la Escuela de Trabajo Social, hace especial énfasis en la participación de los y las estudiantes en el Congreso Internacional, catalogando esta experiencia como una oportunidad clave de aprendizaje en diversos sentidos. “Les permite fortalecer su desarrollo académico, vincularse con otras redes universitarias, compartir experiencias con estudiantes y académicos/as de otros lugares, conocer realidades sociales diversas y reflexionar colectivamente sobre distintas perspectivas asociadas a los escenarios sociales en los que el Trabajo Social se inserta”.

En cuanto a futuras participaciones, Gutiérrez cree que como Escuela hace falta fortalecer una política de participación del estudiantado en este tipo de instancias, de manera que se generen los apoyos necesarios para propiciar una presencia permanente en ellas. “Para la Escuela es un orgullo que nuestros/as estudiantes participen en instancias como éstas, desafiándose a generar análisis y construcción de miradas innovadoras respecto a nuestro quehacer profesional, aportando a la construcción de conocimiento”.

Se trata éste de un punto que los estudiantes también consideran importante, el cual aclara Said, al indicar que “me gustaría que los próximos años se promovieran más estas actividades, que se motivara más a las y los estudiantes a generar conocimiento y compartirlo”.

En este congreso, además, el académico Pablo Suárez, presentó su libro “Intervención Social: Ensayo crítico descolonizador y radial”, en donde realiza una crítica al Trabajo Social Contemporáneo que ha sincronizado su producción teórica, metodológica-técnica, y práctica con el lenguaje civilizatorio neoliberal que abusa y atenta contra los derechos sociales y humanos. Para ello se desarrolla un texto, escrito como ensayo a partir de la interpretación e imagen del fresco de Miguel Ángel en la Capilla Sixtina que representa la “intervención divina”.

La académica Gabriela Pantoja, indica finalmente, que a partir de la participación en este congreso, surgieron una serie de desafíos para la Escuela de Trabajo Social UTEM, entre ellos coliderar grupos académicos, de investigaciòn y discusión disciplinar. “Yo creo que podemos ser una Escuela que lidere estos espacios académicos sobre temas que son parte de nuestro plan de estudios y del sello UTEM”.